miércoles, 24 de julio de 2013

A veces.


A veces (siempre) escucho dos voces dentro de mi cabeza.

A veces (muchas) estas voces se contradicen.

A veces (pocas) las pongo de acuerdo y actúo en consecuencia.

A veces (nunca) hago esto y sale mal.

A veces (algunas) me miro en el espejo y me veo guapa.

Entonces me paso la mano y me despeino.

sábado, 20 de julio de 2013

Última conexión.



No quiero ser igual que los niños, que se aburren en verano.
Voy a coger a mi amiga guapa y espero que allí donde vayamos no haya cobertura.


martes, 16 de julio de 2013

Lo que menos se imaginaba.



Después de todas las veces que se había jurado aprender de los fracasos, allí estaba María, una vez más, tomando un baño y pensando en su circunstancia. A pesar de que el tamaño de su cuerpo era ridículamente pequeño en comparación con el de la bañera, se sentía encallada.

Hacía tiempo que había perdido la cuenta de todas las decepciones. Una vida dedicada a seguir su propia brújula le había dejado poco más que una sensación de desilusión a la que ya empezaba a acostumbrarse. Cerró el grifo con el pie y empezó a fustigarse.

Tal vez ella no funcionaba como los demás. Quizás su aislamiento se debía a que ella no jugaba al juego, no buscaba ganar. En todo caso buscaba sentirse bien consigo misma, sin grandes resultados. Quizás no hablaba el mismo idioma que los demás, puede que se hubiera tomado demasiado al pie de la letra las moralinas del patio de la escuela.

Se tomó un momento para fantasear y deseó cambiar. Jugaba con los dedos en la espuma mientras imaginaba cómo sería dejar de ser fiel a sí misma. Comportarse como había visto hacer a tantas personas tantas veces a su alrededor, sin cuestionarse el porqué de las cosas, sin darle el mismo peso a su vida que a las de los otros. Colocándose siempre por encima, triunfando.

Hmmm.. hundió la nuca en el agua templada y notó cómo se iba colando entre su pelo, haciéndole cosquillas. Sentir la oscuridad de esos pensamientos contrarios a los suyos hacía que recuperase la lucidez. Sumergió la cabeza por completo y soltó despacio todo el aire lleno de rencor que le quedaba, creando nuevas burbujas en la superficie de la bañera. Cuando se quedó totalmente vacía esperó un momento, emergió de nuevo y llenó los pulmones con el aire húmedo y fresco que entraba por la ventana del cuarto. Ya se sentía mejor.

Lo que menos se imaginaba era que en realidad tenía suerte.
Que esa capacidad para sufrir no era más que la evidencia de un corazón grande.
Que un corazón grande siente más intensa la pena, pero también la felicidad.


domingo, 14 de julio de 2013

Toctoctoctoc..



Cada noche golpeo frenéticamente estas teclas.
Y escriba lo que escriba, siempre escribo lo mismo.

sábado, 13 de julio de 2013

La vida y esas cosas.



Aquí estoy otra vez.

Con la camiseta mojada por el sudor, revolviendo entre las fotos y las neuronas, rodeada de cajas, desorden y arena, pensando a qué dedicar los próximos 27 años.

Lo bueno de estar harto del pasado y no tener futuro es que sólo queda el presente.

La oveja blanca de la familia.



La gente se ríe cuando les digo que soy la más normal de mi familia.
Me pregunto si, entre toda la maraña de tíos, primos y demás, habrá alguna persona, aunque sólo sea una, que no sea excéntrica ni tenga problemas de adaptación social.
Lo que se dice una persona "normal".

jueves, 11 de julio de 2013